Los adultos mayores suelen ser una población vulnerable respecto a los problemas asociados al sueño. Cambios relacionados con el envejecimiento, una higiene del sueño inadecuada, problemas de salud, hospitalización reciente, la muerte del cónyuge o de miembros de la familia, cambios en el ritmo circadiano, consumo inadecuado de fármacos hipnóticos y de sustancias como café, tabaco o alcohol, son algunas de la principales causas de estos problemas que afectan su vida personal y su capacidad laboral; no obstante hay una serie de síntomas que pueden detectarse a tiempo para corregir los hábitos de un sueño deficiente y así tener una mejor calidad de descanso que se traduce en una gran calidad de vida en el ámbito personal y laboral.
Para las personas mayores que todavía no están planeando jubilarse, trabajar es una actividad importante en su vida. Un trabajo bien hecho, sea en la profesión que sea, requiere un buen descanso. Las personas mayores pueden observar que sus hábitos de sueño han cambiado durante la vejez: ya no duermen con tanta facilidad, se despiertan en la noche para ir al baño, duermen pero no descansan, entre muchos otros más.
Entonces se dan cuenta de que la capacidad laboral está siendo afectada por un sueño deficiente que no permite un descanso correcto para obtener la energía necesaria que requiere el trabajo.
¿Cómo afecta el sueño la capacidad laboral de las personas mayores?
Como cualquier otro grupo generacional, un sueño deficiente tiene impactos altamente nocivos en la salud física y emocional: afecta el sistema inmune, no permite la recuperación de energía, evita que el cerebro se “limpie” (limpieza de la memoria a corto plazo), entre otras consecuencias; ello también repercute en el ámbito laboral de las personas mayores que se traduce como baja productividad, poca iniciativa, cambios en el humor, falta de concentración y más.
Si por el contrario, las personas mayores tienen un descanso eficiente, obtienen estos beneficios en su capacidad laboral:
- Incrementan su productividad
- Aumentan su capacidad de resolución
- Mejoran su concentración
- Poseen una actitud positiva ante sus colegas
Los cambios de los patrones de sueño suelen ser parte del proceso natural del envejecimiento, pero muchos de estos cambios pueden ser originados por problemas de salud, hospitalización reciente, la muerte del cónyuge o de miembros de la familia, cambios en el ritmo circadiano, consumo inadecuado de fármacos hipnóticos y de sustancias como café, tabaco o alcohol. Cualquiera sea el caso, la recomendación siempre será consultar con un médico especialista, además de adquirir productos de alta calidad, que se adapten a tus necesidades: un colchón con soporte adecuado, almohadas que mantengan la columna vertebral alineada, sábanas hipoalergénicas, etcétera.
Consecuencias del déficit de sueño que afectan la capacidad laboral
- Cansancio general y fatiga
- Deterioro de la memoria, concentración o atención
- Irritabilidad durante la jornada laboral
- Somnolencia diurna
- Disminución de la motivación y la energía
- Propensión a errores o accidentes laborales
- Descenso de la capacidad resolutiva
- Decrecimiento de la creatividad
- Aumento del estrés
Consejos para una buena higiene de sueño:
-
Evita realizar actividades en la cama: leer, escuchar la radio, ver la televisión, entre otras. El cerebro necesita asociar la cama con dormir, por lo que si se hacen otras cosas ahí, el cerebro recibe un doble mensaje y se confunde.
-
Evita siestas durante el día: La única siesta permitida es después de la hora de comer, con una duración de máximo 30 minutos.
-
Limita el consumo de líquidos después de las 6pm: Esto para no tener que despertarse durante la noche, levantarse al baño y perder el ritmo del ciclo circadiano, ya que puede alterarse y entonces comenzarás a despertarte en la madrugada sin razón aparente.
-
Ten en cuenta los efectos de los medicamentos: Los sedantes durante el día y los estimulantes por la noche afectan enormemente el descanso. Consulta con tu médico sobre los horarios de los medicamentos para que no afecten tu horario de sueño.
-
Productos de calidad: Como se mencionó anteriormente, un colchón, almohadas y ropa de cama adecuadas pueden hacer toda la diferencia en la calidad del sueño y, por ende, maximizar la capacidad laboral de las personas mayores.
4 productos esenciales para potenciar tu descanso
-
Colchón Smart Firm: Con tres capas de espuma de memoria, proporciona un soporte adecuado para la espalda, alivia la presión de las articulaciones y disipa el calor. Nuestro colchón cuenta con tecnología de última generación:
- Tejido antimicrobiano que elimina hasta el 99.9% de ácaros y bacterias.
-
Tratamiento NanoCoolTM Fabric que prolonga la sensación de frescura.
-
Tecnología SILVADURTM 930FLEX que potencia la cualidad antimicrobiana de los iones de plata.
-
Almohada Cervical Gel: Mantiene la columna vertebral en una posición adecuada durante toda la noche y permanece fresca gracias al gel que regula la temperatura.
-
Sábanas 100% Bamboo: Suaves al tacto, frescas, transpirables e hipoalergénicas. El tejido del bambú tiene propiedades antimicrobianas y antimicóticas, además no guarda olores. Se pueden lavar a mano o en lavadora.
-
Colcha Bliss: Prelavado para un acabado extra suave; además es fresca y ligera, por lo que es ideal para utilizar en cualquier época del año. Su diseño está por ambos lados, así que se adapta a cualquier estilo. Posee tecnología Pinsonic que impide que su patrón se desvanezca o deshilache.
Como todos, los adultos mayores se benefician enormemente de una buena higiene del sueño, ya que contribuye a una salud óptima, tanto física como mental. Además permite que su capacidad laboral se mantenga al máximo, e incluso llegue a ser mejor que antes. En Smart Bamboo sabemos que un buen descanso hace la diferencia, por eso nuestros expertos trabajan arduamente para crear los productos ideales para cualquier etapa de tu vida.